martes, 19 de agosto de 2008

Remedio contra la depresión

Muchas veces... cuando lloras...
nadie se percata de tus lágrimas...

Muchas veces... cuando estás triste...
nadie se percata de tu tristeza ...

Muchas veces... cuando estás preocupado...
nadie se da cuenta de tu preocupación...

Muchas veces... cuando estás deprimido...
nadie nota tu depresión...

Muchas veces... cuando estás feliz...
nadie se percata de tu sonrisa...

Pero... tirate un pedito, aunque sea chiquititito...
o sacate un pequeño moquito, haciéndote el disimulado...
¡y vas a ver que por lo menos dos ó tres mamonazos
se dan cuenta de lo que estás haciendo!

PD: En este día, para mi extrañamente especial, deseaba mandar un abrazo enorme para todos los que sí se dan cuenta cuando estoy triste, preocupado, deprimido... o inmensamente feliz; aunque también lo hagan de lo último... :P

5 comentarios:

Nayra dijo...

No hay dos sin tres.... muchas felicidades mi niño lindo... que tengas un día muy especial, tanto como lo eres tu... Besitos!!!

yomismamente dijo...

Sabes, hoy es el cumple de 3 amigos más que nacieron en el 81! ¿Qué tendría el 19/08/81 para que tantas mamis dieran a luz ese día?

Muchas felicidades!!!!! Pásalo muy bien en tu día y celébralo a lo grande con tus amiguicos y familia :)

27 tirones de orejas!!

Anónimo dijo...

Simplemente se feliz y disfruta de la vida.
ejem ejem un poquito conmigo jajajaj.

Feliz cumpleaños.

David Rguez. dijo...

Muchísimas gracias a las tres, pues vuestras felicitaciones han sido extrañamente especiales para mi.

No se qué tiene el 19/8/1981, con seguridad, nada diferente al 22/2/1978 o al 5/10/1985, pero al menos forma un número curiosillo: 1981981 ;o)

yomismamente, todavía me duelen las orejas! :P

Nuestra Salud dijo...

Considere un remedio natural que contenga ingredientes homeopáticos seleccionados especialmente para aliviar temporalmente sensaciones de melancolía, tristeza, pena y lloriqueos. Estos remedios homeopáticos se deben tomar en las primeras muestras de la melancolía tales como tristeza, lloriqueo y sensaciones de fragilidad o pena.