viernes, 18 de mayo de 2012

Yo

No culpes a nadie, nunca te quejes de nada ni de nadie, porque fundamentalmente tú has hecho tu vida.

Acepta la responsabilidad de edificarte a ti mismo y el valor de acusarte en el fracaso para volver a empezar; corrigiéndote, el triunfo del verdadero hombre surge de las cenizas del error.

Nunca te quejes del ambiente o de los que te rodean, hay quienes en tu mismo ambiente supieron vencer, las circunstancias son buenas o malas según la voluntad o fortaleza de tu corazón.

Aprende a convertir toda situación difícil en un arma para luchar.

No te quejes de tu pobreza, de tu soledad o de tu suerte, enfrenta con valor y acepta que de una u otra manera, todo dependerá de ti; no te amargues con tu propio fracaso, ni se lo cargues a otro, acéptate ahora o seguirás justificándote como un niño, recuerda que cualquier momento es bueno para comenzar y que ninguno es tan terrible para claudicar.

Deja ya de engañarte, eres la causa de ti mismo, de tu necesidad, de tu dolor, de tu fracaso.

Si, tú has sido el ignorante, el irresponsable, tú, únicamente tú, nadie pudo haber sido por ti.

No olvides que la causa de tu presente es tu pasado, como la causa de tu futuro es tu presente.

Aprende de los fuertes de los audaces, imita a los enérgicos, a los vencedores, a quienes no aceptan situaciones, a quienes vencieron a pesar de todo.

Piensa menos en tus problemas y más en tu trabajo y tus problemas sin alimento morirán.

Aprende a nacer desde el dolor y a ser más grande, que el más grande de los obstáculos.

Mírate en el espejo de ti mismo.

Comienza a ser sincero contigo mismo. Reconociéndote por tu valor, por tu voluntad y por tu debilidad para justificarte.

Reconócete dentro de ti mismo, más libre y fuerte, dejarás de ser un títere de las circunstancias,
porque tu mismo eres tu destino.

Y nadie puede sustituirte en la construcción de tu destino.

Levántate y mira las mañanas, y respira la luz del amanecer.

Tú eres parte de la fuerza de la vida

Ahora despierta, camina, lucha.

Decídete y triunfarás en la vida.

Nunca pienses en la suerte, porque la suerte es el pretexto de los fracasados.

Pablo Neruda

PD: Me pareció una buena forma de dar por cerrado el blog.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Maratón de Atenas

13 de noviembre de 2011

El entrenamiento no había ido todo lo bien que hubiese deseado, las vacaciones y una pequeña lesión/molestia tuvieron la culpa. Aún así, a dos semanas del día M corrí mis primeros 30km seguidos, caminando el número 27. No estaba del todo mal, pero ese día me convencí de que tendría que caminar varios kilómetros para conseguirlo.

Días antes, pequeñas molestias por todos lados, supongo que psicológicas, o eso fue lo que me dije a mi mismo, y ya en Atenas, un frío y un viento gélidos, al menos para lo que acostumbramos por aquí. Los ánimos no estaban donde tendría que haberlos puesto.

Los momentos previos son una tortura: suena el despertador a las 4 y media de la mañana, desayunamos a las 5, caminamos hasta la parada del metro donde nos recoge la guagua de la organización y llegamos al estadio de la ciudad de Maratón más de 2 horas antes de empezar. Llueve, no muy fuerte, y sopla el viento, a ratos bastante duro, vamos al baño varias veces, serán los nervios, y decidimos esperar sentados en el suelo de los vestuarios, que en esos momentos era lo más parecido a un campo de refugiados tras una catástrofe, sin la más mínima exageración.

Queda poco, entregamos la mochila, estiramos un poco y nos vamos colocando en el cajón de salida. Aunque hay gente temblando de frío, el ambiente ayuda bastante a mejorar los ánimos, vamos al baño una vez más, y esperamos pacientemente el gran momento.

Los primeros momentos son muy tranquilos, vamos muy relajados y el cuerpo va entrando en calor, nos fijamos en todos los detalles posibles, absorviendo al máximo la experiencia, la gente tira muchísima ropa de abrigo, y algunos "espectadores" aprovechan para hacer su agosto particular, vemos algún grupo de corredores disfrazados con su casco, lanza y escudo incluídos, otros descalzos, y en general, algo que aprecio particularmente, personas de toda edad, nacionalidad, raza, color y condición física.

Poco a poco los kilómetros van cayendo, seguimos tranquilitos, con el piloto automático, y los múltiples avituallamientos lo hacen todo mucho más fácil. Tenemos ganas de llegar a la media, 21km y eso hace que mentalmente todo vaya un pelín más despacio, pero lo conseguimos en un tiempo relativamente malo (2h16'), aunque a posteriori se demostrase que aparentemente nos vino de lujo.

En mi cabeza a partir de ese momento, todo era restar kilómetros para la meta, y me ayudaba a ir algo más cómodo. Sin quererlo, y casi sin darnos cuenta, vamos adelantando a bastante gente, y lo mejor de todo, vamos con muy buen ánimo, comentando cosillas e incluso ríendo a ratos. Alcanzamos los 30km y no hemos dejado de correr en ningún momento, salvo para regar algunos árboles y comernos una galletilla, pero a partir de ese momento era territorio totalmente desconocido, porque nunca habíamos corrido tanto de forma continuada.

Seguimos bien y seguimos adelantando a gente, cada vez va quedando menos y parece que el cuerpo, y sobre todo la mente, continúan funcionando. Afrontamos algunas cuestas que podrían habernos complicado las cosas, pero iban quedando atrás y ahí seguíamos, así que ya no podíamos ocultar nuestra sorpresa, pasara lo que pasase, estábamos haciendo la carrera de nuestra vida.

Los últimos kilómetros cuestan bastante más y hubo una última rampa en la que los calambres me avisaron de que no resistirían mucho más en aparecer, pero era imposible pararse. Cada vez había más gente animando y ya no corríamos por nosotros mismos, sino por todo lo que estaba quedando atrás, el cuerpo se quejaba pero la mente lo tenía clarísimo.

Cruzamos la meta totalmente emocionados y con los pelos como escarpias, haciendo la segunda mitad de la carrera 13 minutos más rápido que la primera, relativamente más suave. Nos abrazamos, lo habíamos conseguido, juntos.

Hace no demasiado tiempo, creía que correr durante más de media hora seguida era una auténtica locura. Este día me repetí unas palabras que hace tiempo me acompañan: si quieres algo, ve a por ello! Cuesta mucho, muchísimo, hay que dar infinitos pasos hacia adelante y siempre se dan algunos pasos hacia atrás, e incluso se producen interrupciones que hacen que todo se tambalee, pero si lo quieres de verdad, te entregas y das lo mejor de ti, lo conseguirás.

Este relato, crónica o como quieran llamarlo, es para mi, para mis recuerdos, para el futuro, pero también para todos aquellos que me apoyaron y me animaron en mayor o menor medida, cada uno a su manera, antes o después, porque hacen falta y los necesito, y mucho, así que ahí queda mi más sincero agradecimiento.

Mención especial para mi compañero de viaje, todo fuerza de voluntad y la mejor distracción para los momentos de sufrimiento, y para mi ángel de la guarda, que me acompaña, ayuda y reconforta en todo y siempre, sin excepción, aún cuando menos lo merezco. Sin ellos, nada de esto hubiera sido posible.

Datos curiosos
Bib: 8993
Start: 00:50 (time behind race start)
5km: 34:38
10km: 1:07:03
21,1km: 2:16:29
30km: 3:09:50
Finish: 4:19:02
Pace: 6:05/km
Rank: 3237/6144

jueves, 10 de noviembre de 2011

desmotivaciones.es... Esa fuente de inspiración!

Y tan bien que estaría...

domingo, 2 de octubre de 2011

Try again!

Conformarse y dejar de insistir,
es como ver a alguién ahogándose y dejarlo morir.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Formas de querer

¿Existe acto de mayor crueldad tolerada que la de aquellos que se permiten el lujo de ser felices sabiendo que otros renuncian a su felicidad para que ellos los sean?

jueves, 4 de agosto de 2011

Manifiesto del skyrunner

... Besa la gloria o muere intentándolo. Perder es morir, ganar es sentir. La lucha es lo que diferencia a una victoria, a un vencedor. ¿Cuántas veces has llorado de rabia y de dolor?, ¿Cuántas veces has perdido la memoria, la voz y el sentido del agotamiento?. Y cuántas veces en esta situación, te has dicho, con una gran sonrisa: "¡Otra vuelta!, ¡Un par de horas más!, ¡Otra subida!. El dolor no existe, sólo está en tu cabeza. Contrólalo, destrúyelo, elimínalo y continúa. ...". Soy egoísta, ¿verdad?. El deporte es egoísta, porque hay que ser egoísta para saber luchar y sufrir, para querer a la soledad y al infierno. Pararse, estornudar, tener frío, no sentir las piernas, tener náuseas, vómitos, dolor de cabeza, golpes, sangre ... ¿Hay algo mejor?

El secreto no está en las piernas, sino en la fuerza para salir a correr cuando llueve, hace viento y nieva; cuando los rayos incendian los árboles a tu paso; cuando las bolas de nieve o las piedras de granizo te golpean las piernas y el cuerpo desnudo contra la tormenta y te hacen llorar, y para continuar, te tienes que secar las lágrimas para poder ver las piedras, los muros o el cielo. Renunciar a unas horas de fiesta, a unas décimas de nota, decir no a una chica, a las sábanas de la cama que se te enganchan a la cara. Ponerle huevos y salir bajo la lluvia hasta que las piernas sangren de los golpes que te has dado al caer al suelo por culpa del fango, y volver a levantarte para continuar subiendo ... hasta que las piernas te pidan a pleno pulmón: ¡Basta!. Y te dejen colgado en medio de una tormenta en las cimas más altas, hasta morir.

Las mallas mojadas por la nieve que arrastra el viento y que también se te engancha a la cara y te congela el sudor. Cuerpo ligero, piernas ligeras. Sentir como la presión de tus piernas, el peso de tu cuerpo, se concentra en los metatarsos de los dedos de los pies y hace una presión capaz de romper rocas, destrozar planetas y mover continentes. Con las dos piernas suspendidas en el aire, flotando como el vuelo del águila y corriendo más veloces que un guepardo. O bajando, con las piernas deslizándose sobre la nieve y el fango, justo antes de impulsarse de nuevo para sentirte libre para volar, para gritar de rabia, amor y odio al corazón de la montaña, allí donde sólo los mas intrépidos roedores y aves, escondidos dentro de sus nidos entre las rocas, se pueden convertir en mis confesores. Sólo ellos conocen mis secretos, mis temores. Porque perder es morir. Y no se puede morir sin haberlo dado todo, sin romper a llorar del dolor y las heridas, no se puede abandonar. Hay que luchar hasta la muerte. Porque la gloria es más grande, y sólo se tiene que aspirar a la gloria o perderse por el camino, habiéndolo dado todo. No vale no luchar, no vale no sufrir, no vale no morir ... Ya es hora de sufrir, ya es hora de luchar ...

Extracto del "Manifiesto del skyrunner" en el libro "Correr o morir" de Killian Jornet.

martes, 26 de julio de 2011

Al aire

Y yo me pregunto...

¿En qué momento pasamos a ser padres de nuestros padres o hijos de nuestros hijos?

domingo, 26 de junio de 2011

Objetivo: Maratón 42k

Mi plan de principiante:

Sem.
LUNES
MARTES
MIÉRCOLES
JUEVES
VIERNES
SÁBADO
DOMINGO
1
Descanso
5Km
7Km
7Km
Descanso
5Km
10Km
2
Descanso
5Km
8Km
5Km
Descanso
5Km
11Km
3
Descanso
7Km Fartlek
8Km
5Km
Descanso
5Km
13Km
4
Descanso
7Km Fartlek
5Km
7Km
Descanso
5Km
16Km
5
Descanso
5x200m
5Km
7Km
Descanso
5Km
19Km
6
Descanso
3x400m
7Km
10Km
Descanso
8Km
8Km
7
Descanso
3x1500m
5Km
8Km
Descanso
5Km
24Km
8
Descanso
10Km
8Km
10Km
Descanso
8Km
11Km
9
Descanso
6x200
7Km
11Km
Descanso
5Km
29Km
10
Descanso
11Km
10Km
11Km
Descanso
10Km
15Km
11
Descanso
4x400
8Km
13Km
Descanso
5Km
32Km
12
Descanso
3x1500m
8Km
13Km
Descanso
5Km
16Km
13
Descanso
6x800m
10Km
13Km
Descanso
5Km
35Km
14
Descanso
11Km
8Km
13Km
Descanso
8Km
16Km
15
Descanso
6x800m
10Km
13Km
Descanso
5Km
38Km
16
Descanso
4x1500m
11Km
16Km
Descanso
7Km
16Km
17
Descanso
8Km
5Km
8Km
Descanso
5Km
42Km
18
Descanso
10Km
8Km
13Km
Descanso
7Km
19Km
19
Descanso
8Km
7Km
10Km
Descanso
5Km
19Km
20
Descanso
8Km Fartlek
7Km
Descanso
Descanso
3Km
MARATÓN

A ver qué hago con el mes de vacaciones...

Pero si todo sale bien, ese domingo de la semana 20 será: el próximo 13 de noviembre en… Atenas!

lunes, 13 de junio de 2011

Contrariado...

Yo.

Minúscula palabra que representa la inmensidad del egoísmo.

Como el veneno...

domingo, 29 de mayo de 2011

Ciclos de vida

Creación, ilusión, decepción, negación y aceptación.