Un diario 'muy' personal aunque 'nada' privado que nos permite conocernos un poco, o un poco mejor, además de alcanzar un grado superior de autoconocimiento.
Las parejas de opuestos que funcionan en armonía: este ha pasado a ser un tema de nuestra búsqueda de la toma de decisiones perfecta. Cálculo y evaluación. Paciencia y oportunidad, intuición y análisis, estilo y objetividad [...] estrategia y táctica, planificación y reacción. El éxito proviene de colocar estas fuerzas en equilibrio en una balanza y aprovechar su poder inherente.
Actualización 03/07/2009 Pongo una versión alternativa del video porque han quitado el original de youtube.
Well you done done me and you bet I felt it I tried to be chill, but you're so hot that I melted I fell right through the cracks Now I'm trying to get back
Before the cool done run out I'll be giving it my bestest And nothing's going to stop me but divine intervention I reckon it's again my turn to win some or learn some
But I won't hesitate no more, no more It cannot wait, I'm yours
Well open up your mind and see like me Open up your plans and damn you're free Look into your heart and you'll find love love love love
Listen to the music of the moment people dance and sing We're just one big family And it's our God-forsaken right to be loved loved loved loved loved
So I won't hesitate no more, no more It cannot wait, I'm sure There's no need to complicate Our time is short This is our fate, I'm yours
Scooch on over closer, dear And I will nibble your ear
I've been spending way too long checking my tongue in the mirror And bending over backwards just to try to see it clearer But my breath fogged up the glass And so I drew a new face and I laughed
I guess what I'm be saying is there ain't no better reason To rid yourself of vanity and just go with the seasons It's what we aim to do Our name is our virtue
But I won't hesitate no more, no more It cannot wait, I'm yours
Well open up your mind and see like me Open up your plans and damn you're free Look into your heart and you'll find that the sky is yours
Please don't, please don't, please don't There's no need to complicate Cause our time is short This, oh this, this is our fate, I'm yours!
Relacionado con la reciente compra de un deshumidificador y una aspiradora... Es muy curioso darse cuenta de cómo en no pocas ocasiones nos crean/creamos necesidades sobre productos que hace no tanto tiempo eran, como poco, absolutamente (im)prescindibles, cuando no completos desconocidos. Y encima no vale cualquiera, porque no purifican el aire, no tienen el sello de calidad X o por cualquier otra historia que te aumente el precio de forma exponencial.
Realmente estuvimos a punto de caer en la tentación; finalmente, por fortuna y claridad de ideas, preferimos vivirla y disfrutarla.
Me asaltan las dudas... ¿es esto realmente lo que quiero hacer?
Nuestra existencia es única e irrepetible, no podremos volverlo a intentar. Todos, en mayor o menor medida, tenemos en mente algunos sueños, aventuras, retos o proyectos. Sin embargo, son pocos los que se deciden a dar el salto.
Hace falta mucha honestidad, mucha valentía. Hay que arriesgarse y trabajar duro para conseguirlo...
No voy a engañarme, éste ha sido un fin de semana sin más historia que los demás, con algún que otro mal momento y, para mi suerte, bastantes otros mucho mejores. La diferencia está en que hoy el insomnio me ha animado a contarlo...
El viernes por la tarde pasó con una reunión de trabajo amistosa o de amistad trabajosa (podría decidirlo tras pensarlo un rato, pero no ahora), que se alargó más de lo esperado, aunque positivamente, salvo por el hecho de que tuve que dejar sólo ante el rocódromo a mi buen amigo (suerte que estaba debidamente preavisado).
La noche trajo el mal momento al que me referí anteriormente con un muy buen arbitraje (modestia aparte), pero con una muy mala interpretación por parte de dos jugadores, a mi modo de ver, dominados por su frustración. A ello se le unió un partido posterior nefasto, y encima contra la familia... ;o) Menos mal que veo al flag como un momento de desconexión, porque parece que algunos se empeñan en echarme de ahí a patadas.
En fin, como no podía ser de otra manera, al día siguiente volvió a salir el sol, nos fuimos a escalar a Sorrueda. Éramos seis y aunque casi siempre teníamos dos vías abiertas, no pude probar ninguna nueva, pero eso fue lo de menos porque el maravilloso entorno y la inmejorable compañía bastaban. Aunque no comparten nuestra pasión, o precisamente por eso, estoy especialmente orgulloso de las niñas por sus esfuerzos y por sus logros.
También aprendí a que la buena comunicación y entendimiento entre el que escala y el que asegura no sólo es vital para el primero, y que si vas a saltar es mejor avisar. Sólo hubo que lamentar el sustillo, un ¿pequeño? corte y la merecida bronca de la novia preocupada; esperamos haber aprendido la lección... :P
El domingo fue más tranquilo, unas horitas de playa con la niña, un buen atracón de pasta, vino y ensalada, algo de tenis en la televisión (la primera derrota de Nadal en Roland Garros), una siesta y poco más hasta volver a casa. Por la noche algo de trabajo en el ordenador y... ¡el dichoso insonmio!
Por cierto, a estas horas de la madrugada se me pasan por la cabeza muchos y muy variados pensamientos, pero hoy el que más se repite es... ¡odio la siesta!