Este pasado fin de semana pude disfrutar en buena compañía del buen tiempo del sur de Gran Canaria, entre otras cosas, pero el alojamiento no fue una de ellas, porque las instalaciones y el servicio recibido en los apartamentos Cala d'Or en la zona de Puerto Rico dejaron bastante que desear, al igual que su web, en la que ni las fotos salieron bien.
Empezamos mal al ver que el apartamento era minúsculo, a pesar de que la reserva era para cuatro personas, y no tenía ni pizca de ventilación, lo que lo convertía en un verdadero horno, en el que sencillamente no se podía estar con el calor que hacía.
Como quiera que dentro del apartamento sólo ibamos a dormir, aunque casi tuviéramos que hacerlo dentro de la bañera y con el grifo abierto, nuestra esperanza era poder disfrutar de la piscina, pero esto tampoco pudo ser... He visto algunas hinchables más grandes, y encima cada vez que alguién se tiraba a la piscina te mojaba seguro, ya que era imposible escapar, a menos que te pusieras en las escaleras.
Pero lo peor estaba por llegar, y es que la segunda noche, cuando estábamos cenando, de repente nos llama a gritos y desde la piscina un energúmeno, que hacía las veces de vigilante, diciéndonos que no podíamos estar cuatro personas en el apartamento. Después de algún que otro intercambio de palabras, acabé diciéndole que la reserva estaba hecha para cuatro personas y que nos íbamos a quedar cuatro personas, aplazando para el día siguiente el pertinente desahogo, en el que por supuesto llueven sus disculpas y sus buenas intenciones, pero ya era demasiado tarde para cambiar la lamentable imagen que nos dieron.
Ya lo saben, salvo que sean ellos quiénes les paguen a ustedes por quedarse, busquen cualquier otro sitio mejor, no les será nada difícil encontrarlo.
lunes, 4 de agosto de 2008
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1 comentario:
Vaya, vaya. Está bien saberlo.
Un saludico.
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